Gracias, Señor, por poner en mí la semilla
de tu cercanía, de tu cuidado,
de saber que velas y guías mi vida.
¡Puedo saberme acompañado!
Que afronte y viva cada momento transformado
por la certeza de que estás a mi lado.
Y desde esa conciencia... cuenta conmigo
para velar, guiar y cuidar de cada persona
como seres únicos que son para ti.
Cuenta conmigo para hacer saber tus Palabras:
"no tengáis miedo. ¡Yo estoy con vosotros!".